El lunes 18 inició un proceso de diálogo entre la Alianza por la Defensa del Recurso Hídrico de Puntarenas. A la sesión se presentaron representantes de SENARA, Dirección de Aguas, Municipalidad de Puntarenas, AyA, Comisión de Emergencias y otros como observadores.
La Alianza discutió el impacto negativo de los proyectos ya activos en las comunidades, poniéndose en la mesa argumentos que demuestran que no han cumplido con los objetivos que los impulsan en el papel. Entre estos impactos que reclaman las comunidades está la incapacidad de las Sociedades de Usuarios de Agua para administrar un recurso tan importante como el agua que ha llevado al fracaso de muchas de las inversiones de SENARA en la zona de Puntarenas, cosa que ya la propia Contraloría ha ratificado mediante una auditoría sobre las acciones de SENARA realizada en agosto de 2015.
Problemas cotidianos que observan las comunidades con estos proyectos son el uso irracional del agua por parte de los beneficiarios, usos no agropecuarios del agua como piscinas o riego de calles y techos, altos impactos ambientales por la sobreexplotación de los ríos, e impactos sociales negativos como la división de las comunidades y la exclusión del acceso al agua por causa de las desigualdades económicas existentes en la zona. Todo lo anterior sin que SENARA fiscalice ni evalúe la eficiencia real de sus proyectos, ni considere que las sociedades de usuarios de agua cumplan al menos con los Estudios de Impacto Ambiental que sirvan para prever el costo/beneficio de sus inversiones.
Las comunidades rechazan que la construcción del proyecto de riego Guacimal Sardinal se esté llevando a cabo sin viabilidad ambiental ni permiso municipal de construcción, dos requisitos de Ley, pues no es proporcional a la supuesta emergencia y consideran que su inclusión en el Plan de la CNE es más bien una salida para desatender completamente el conflicto que se arrastraba desde 2011 con la comunidad de Guacimal que había hecho saber a SENARA su oposición al proyecto porque se recibió información falsa al inicio para obtener la aprobación de los permisos de paso de tuberías y el visto bueno de la comunidad y además por su preocupación por el alto impacto de la captación sobre el río Veracruz, un río de agua limpia muy valorado en la comunidad y que está siendo ya evaluado por AyA para aprovechamiento en acueductos de muchas comunidades de Puntarenas que sufren por la escasez de agua para uso y consumo básico.
SENARA accedió a mantener la paralización de las obras por 15 días más del plazo de paralización original. El proceso de diálogo continuará el próximo lunes con la audiencia de los argumentos de la Sociedad de Usuarios de Agua de Los Ángeles, beneficiaria de este proyecto financiado por el SENARA.
Fuente: FECON
Fotos: Fabiola Pomareda y Josué Segura
Last modified: 20/01/2016