El cambio climático y los bosques tropicales

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El Acuerdo Climático de París reconoció el papel crucial de los bosques para la mitigación del cambio climático, ya que los objetivos de mitigación globales requerirán emisiones de carbono negativas. Las opciones forestales para la mitigación del clima incluyen la pérdida de bosques evitada, la gestión mejorada de los bosques naturales, la forestación (definida por la CMNUCC (Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático)  como “la conversión directa inducida por el hombre de tierras que no han sido forestadas durante un período de al menos 50 años en tierras boscosas”, reforestación  en tierras que fueron forestadas pero que se han convertido en no forestadas” y plantaciones mejoradas. Sin embargo, estas opciones presentan algunos desafíos. En el caso de la forestación, existen preocupaciones sobre la biodiversidad y el consumo de agua sobre la plantación de especies forestales en sistemas no forestales. La plantación de especies arbóreas exóticas podría aumentar el secuestro de CO2, pero a costa de perder otros procesos y servicios del ecosistema. Si bien la pérdida de bosques evitada y la ordenación mejorada de los bosques naturales suscitan menos preocupaciones sobre las posibles compensaciones, aún implican desafíos críticos para la gobernanza ambiental, especialmente en los países tropicales. ( Bustamante,  March 20, 20200). Traducción del autor.

Estados Unidos tiene la responsabilidad de manejar los bosques tropicales de sus territorios y en el estado de Hawái. En estos bosques se hace investigación, gestión y transferencia de tecnología. Estos bosques albergan una flora y fauna altamente endémicas y en peligro crítico de extinción, y albergan una notable diversidad de culturas anfitrionas. La mayoría de estos bosques  se encuentran en islas, que incluyen: el estado de Hawái; los Territorios de Puerto Rico, Islas Vírgenes, Guam y Samoa Americana; la Commonwealth de las Islas Marianas del Norte; y tres Estados del Pacto de Libre Asociación que son la República de Palau, la República de las Islas Marshall y los Estados Federados de Micronesia. Estas geografías abarcan la mitad del mundo y albergan bosques que se formaron en climas muy variados, desde bosques húmedos de tierras bajas ecuatoriales y manglares costeros hasta turberas montanos, bosques secos subalpinos y desiertos alpinos. Como resultado tanto de la alta diversidad biológica como del aislamiento geográfico, estos ecosistemas también sustentan un gran número de culturas indígenas que tienen relaciones de conocimiento tradicional a escala milenaria con los recursos locales. Además, debido a esta tremenda diversidad geográfica, topográfica, ecológica, de zonas de vida, biótica y cultural, las islas tropicales afiliadas a los EE. UU. tienen sensibilidades y vulnerabilidades muy complejas y de amplio alcance al cambio climático, especialmente cuando se consideran interacciones con invasiones biológicas, alteración de la perturbación. regímenes y cambios de uso de la tierra 

Los bosques tropicales son el hogar de casi la mitad de las plantas y la vida silvestre de la Tierra. Las selvas tropicales desempeñan una función esencial para el clima al absorber dióxido de carbono. Desafortunadamente, los bosques tropicales se están talando a un ritmo alarmante en todo el mundo y liberando más de 1.500 millones de toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera, lo que equivale al 15% de todas las emisiones de carbono inducidas por el hombre.. 

Los científicos dicen que la deforestación en el Amazonas está llevando a este ecosistema a un punto de inflexión en el que el bosque se convertirá gradualmente en una sabana seca. Una vez que esté suficientemente degradado, el bosque perderá su capacidad de generar su propia lluvia, lo que evitará que el ecosistema de la selva tropical pueda existir. En lugar de bosques frondosos repletos de vida silvestre, el Amazonas sería una extensión desolada de matorrales.

Los bosques tropicales contienen el 25% de la biomasa terrestre de la Tierra e intercambian más carbono y energía con la atmósfera que cualquier otro tipo de ecosistema.

Es urgente que se detenga la tala en los bosques tropicales. Por el contrario debemos aumentar el área de reforestación de estos bosques.

Por: Dr. Carlos Pérez Morales. Geógrafo

Last modified: 03/09/2021

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